NICOLAS MIRANDA ESPINOZA
La producción de obra que desarrollo se basa en estrategias operativas, en la formulación de interrogantes más que la elaboración de respuestas. Para tal enunciado he remitido mi trabajo a dos nociones claves: el camuflaje (con un otro) y el acople (a un otro) como gestos.
Lo anterior desemboca en el intento constante de cuestionamiento a "verdades" planteadas de antemano por contextos específicos (institución estética, calle, objetualidad, mobiliario, identidad país, etc). El punto de partida o "pie forzado" responde a cómo el objeto puede resignificar el espacio que habita -o cuáles son las posibilidades de habitar un lugar determinado permitiendo una segunda lectura.
En consecuencia con lo anterior es fundamental tomar en consideración las características formales, funcionales y abstractas (identidad, memoria o signo) de los objetos y espacios a manipular en cada caso.
Asumo la visualidad como motor fundamental de nuestro contexto actual; ella se produce y se consume (fetiche de la mercancía ¿no?). Plantea una promesa de incorporación -terreno abstracto- pero ejecuta una acción concreta: el consumo.
De tal manera, la imagen y la decodificación social de ella no le pertenece a la institución estética en su totalidad, sino que a las dinámicas globales de consumo. Es desde ese punto donde me apropio de imaginarios colectivos y elementos (objetuales) reconocibles para su posterior desplazamiento o cruce con otros territorios.
No planteo una reivindicación estética, es más bien un reconocimiento contextual que se apoya en la estética para abordar la imagen en tanto lenguaje o más lejos: las artes visuales contemporáneas como un asunto de análisis lingüístico (la resignificación como base política).
Desde el objeto y su entorno se puede calificar mi producción inserta en el "site specific" aunque corresponde aclarar que el trabajo en sitio específico no remite solo a una construcción matérica reducida, sino que, en la lógica de Perec, este gesto intencional puede abordar el espacio concreto a habitar, así como la calle donde se ubica, su barrio, ciudad, país y su identidad, aspiraciones y fracasos.
Los desplazamientos y cruces que planteo se nutren de figuras retóricas que se constituyen como herramientas pilares para el pensamiento crítico: ironía, analogía, metáfora y oxímoron. Me apropio de elementos decodificados para releerlos, buscar un doble sentido o segunda lectura desde la mixtura de territorios y objetualidades, generalmente una unión entre el terreno de las artes visuales con objetos y espacios de consumo reconocibles. En dicha línea considero fundamental el humor, en la medida en que desde el mínimo gesto, desde la sutileza más fría, es posible reinterpretar y manipular signos asumidos por consumados en tanto se pone al desnudo las contradicciones que arrastran, todo lo que corresponde a un juego de palabras.

Records de Catalunya Resina y pintura para auto
50 x 50 x 25 cm Pieza única 2014




Es Belo, Es forte, Impavido, Colosso
35 x 35 x 22 cm Resina y pintura epoxy
Pieza única 2014



IN CASH
GALERÍA METROPOLITANA Latinoamérica: zona de experimentación
Curatoría: Ana María Saavedra - Luis Alarcón
Nicolás Miranda exhibe una operación escultórica denominada In cash, resultante de un juego de lenguaje basado en el anagrama y el retruécano visual. En términos conceptuales, se trata de una serie escultórica que propone un cruce entre obras de arte contemporáneo reconocidas mundialmente y tres tópicos extraídos de la “marca Perú”. En términos formales, la propuesta consiste en 9 piezas escultóricas construidas en resina y ubicadas sobre plinto, cubiertas con óleo, pintura metálica o pintura acrílica (de 25 x 25 x 25 cm cada una). Algunos ejemplos de la serie son: Self de Marc Quinn, The Listener de Patricia Piccinini y Fuck Face de los hermanos Chapman reconstruidos como objetos precolombinos, o la (re) mezcla en clave gastronómica de La imposibilidad física de la muerte en la mente de algo vivo (tiburón) de Demian Hirst.
De exportación, finalmente, es una apuesta por la articulación y/o profundización de redes de trabajo y acción entre espacios y/o proyectos pares, así mismo la activación de nuevas formas y contenidos para un arte contemporáneo (auto) reflexivo y crítico.




